Os presentamos a Yerko, músico y cantante con un futuro prometedor. Muy pronto podremos verle actuar en Madrid Music Hall en un concierto benéfico. Aquí tenéis su entrevista, esperamos que os guste.
¿Qué es para ti la música?
Creo que no exagero al decir que la música es parte central de mi pequeño mundo. Es el principal lenguaje de mis pensamientos, mis sueños y mi subconsciente. Y es bastante responsable también de mi estado anímico. En los buenos momentos, es una amiga inseparable que marca el ritmo de las emociones y me hace reír, y en los momentos difíciles es un refugio en el que me escondo y en el cual vuelco mis frustraciones y mis miedos.
¿Cómo surgió tu interés por tocar y cantar?
En realidad, yo empecé a expresarme cantando antes que hablando, según me han dicho porque yo no me acuerdo… 😉 . La realidad es que desde muy pequeño he visto vídeos míos cantando canciones de Serrat antes de saber qué demonios estaba diciendo con esas letras. En cuanto a tocar, puse las manos en un piano por primera vez con 3 o 4 años, y desde entonces ha sido un vehículo más de expresión en mi vida, aunque he de confesar que más difícil de dominar y menos natural que la voz. Sin embargo, he dedicado gran parte de mi vida a lograr un nivel muy alto de control del piano como instrumento solista.Cómo disciplina conjunta, es algo más reciente, animado por otros músicos que lo veían una muy buena combinación para mi. El proceso ha sido bastante orgánico y nada forzado.
¿Cómo fue ese primer concierto donde tocaste y cantaste por primera vez?
Hace unos 6 años, en un concierto muy bonito y especial para mi, intérprete al piano una serie de arreglos muy personales sobre canciones modernas que me habían marcado de alguna u otra manera. Poco tiempo después, el bis que di después de un recital bastante intenso de repertorio clásico, fue uno de esos arreglos, el Hallelujah de Cohen, cantando yo a la vez. Fue un poco rudimentario, pues iba sin micrófono y el arreglo era complejo, pero fue muy gratificante.
¿Qué puedes contarnos acerca de el concierto que vas a realizar en Madrid Music Hall?
El concierto pretende ser, ante todo, una comunicación directa, relajada, pero intensa en las emociones, con el público. Es un repertorio de temas muy ecléctico en cuanto a estilos y a generaciones, pero tienen en común lo icónico y la cantidad de imágenes y situaciones que nos vienen a la cabeza al escuchar mucha de esa música. Las versiones son personales, yo improviso todos los acompañamientos y sólo tengo delante la letra y un cifrado americano para la armonía. Sin embargo, trato de mantener el espíritu original de las canciones, para que cualquiera pueda identificarlas y participar de la experiencia.
¿Que puedes contarnos acerca del jazz y la improvisación?
Creo que es uno de los géneros más bonitos, sorprendentes e injustamente olvidados por la industria musical (me refiero a que es minoritario frente a otros muchos). Creo además que tiene unas posibilidades infinitas de expansión y de creatividad, y es perfectamente combinable con otros géneros. El jazz es un concepto muy amplio hoy en día, y es difícil definirlo en un estilo determinado. Pasa un poco como con el término «música clásica»: intentar englobar a Mozart, Brahms y Rachmaninov en un mismo género o estilo me resulta casi igual de complicado que encasillar a Oscar Peterson, Keith Jarret y Brad Meldhau. Pienso que la improvisación es fundamental en la carrera de cualquier músico, y debería integrarse mucho más en la enseñanza desde los niveles más iniciales.
¿Alguna vez te has planteado hacer tus propias composiciones?
De hecho, tengo varias. He compuesto muchísimos arreglos, los cuales, por su lenguaje, su polifonía y su estilo propio, se alejan tanto del original que casi se pueden considerar composiciones propias, jajaja.Tengo algunas piezas que si son totalmente originales, y que he interpretado alguna vez en concierto. Sin embargo, y creo que es algo que debería explorar a no muy largo plazo, nunca he intentado crear mis propias letras para elaborar una canción.
¿Cual es el estilo con el que te sientes más identificado?
La buena música: sincera, espontánea, generosa, genial y bien interpretada.
¿Cómo ves el panorama actual?
En nuestra mano está avanzar hacia lo que yo creo que puede ser una evolución positiva de la música: acercar el público al escenario y bajar el intérprete al patio de butacas. Es decir, complicidad y comunicación. No me gustan nada las figuras intocables y endiosadas que tanto venden hoy en día, aunque me encante la música que hagan y sean genios vocales o instrumentales. Al final sólo estamos haciendo música, un poquito de perspectiva y humildad.Por otro lado, creo que hay que luchar mucho por una inclusión necesaria e inteligente de la música en la educación desde las bases, así como su integración con otras materias.
Preguntas PING PONG ( Responde con una palabra)
Una ciudad: Nueva York
Una canción: Mediterráneo (Serrat)
Un disco: Keith Jarret – The Köln concert
Un cantant@: Jon Bon Jovi
Un libro: El maestro y margarita (Bulgákov)
Un músico: Beethoven
Una bebida: Agua
Una comida: Calabaza
Un bar/pub : Una chocolatería en París
Un lugar: La cordillera del Himalaya
Un restaurante: El que debería haber abierto mi padre
Una película: Amadeus (Milos Forman)
Un coche: Uno eléctrico que no consuma gasolina
Seguimos !!
Cuéntanos algo que te encanta : El deporte y su conexión con la naturaleza. Los viajes a la montaña, subir hasta perderme por encima de las nubes. Los animales.
Algo que odias: Sentir que no he sido sincero conmigo mismo, sentir que he herido a alguien que quiero, ser injusto, sentir que no aprovecho el tiempo.
Cuéntanos que cosas vas a hacer próximamente: Quiero vivir nuevas experiencias desde la tranquilidad y la convivencia con otras opiniones y personas. Creo que he hecho muchas cosas sólo hasta ahora y me apetece aprender y observar de las ideas de otros, y hacerme también un poco más visible y accesible al resto.
PARA LA SECCIÓN DE ANÉCDOTAS
Cuéntanos algo que te haya ocurrido en algún concierto, de gira o algo relacionado con el mundo musical:
Recuerdo con mucho cariño los primeros años en el Conservatorio Superior de Madrid, con nuestro grupo de amigos y grandísimos músicos (Beatriz González, Ramón Grau, David y Juan Caro, Celita, Irma y otros muchos). Los conciertos eran un auténtico despropósito y desastre en lo musical, pero nos reíamos de todo y nos sentíamos muy vivos.
