Juan Zelada, Cantante y Compositor

Os presentamos a Juan Zelada , cantante y compositor de éxito. Aquí tenéis la entrevista que le hemos hecho para que podáis conocerle un poquito mejor. Esperamos que os guste.

¿Cómo surgió tu interés por cantar? El hilo musical de fondo en el ámbito familiar. Vinilos que sonaban de fondo, mi padre a la guitarra o al teclado. pronto me puse a aporrear el teclado Clavinova de casa, a los 8 años. Autodidacta como mi padre, ese intento de acompañarme con el instrumento era complementado por melodías, balbuceo musical, empezar a sacar canciones de oído y, poco a poco, cogiéndole el gusto. 

¿Cuáles fueron tus influencias? De pequeño grandes clásicos como Elvis, Ray Charles o Los Beatles (ahí es nada…). Poco a poco me picaba la curiosidad de componer gracias a grandes compositores/músicos como Billy Joel, The Police, James Taylor, Paul Simon, y el baile y la sensibilidad por el rhythm and blues quizás vino por escuchar mucho a Michael Jackson, Stevie Wonder, Ottis Redding… Ahí «jugábamos» a imitar sus bailes absurdos, sus cantares, y peculiaridades. En el mundo latino, de pequeño-enano se escuchaba en los 80 Mecano, Hombres G, Un pingüino en mi ascensor!. Tras muchos periplos por el extranjero, fui buscando otro tipo de estilos y lo latino lo iba escuchando on/off. Ya más maduro musicalmente, me encantó escuchar mucho jazz durante una fase, mucho folk y canción de autor y bandas como Dave Matthews Band, John Mayer, Ryan Adams, Josh Rouse, Kings of convenience, Ray Lamontagne, Bon Iver, Foy Vance, Seu Jorge, Michael Kiwanuka…etc..etc..

¿Cuándo viste o cómo fue ese momento en el que decidiste dedicarte a la música? 
De pequeño siempre lo sueñas y «te lo flipas» con tu primo y tus hermanos, luego los golpes de realidad suman mucho también. Lo vi claro ya desde el primer año de universidad en la Complutense estudiando comunicación audiovisual. Las pellas se acumulaban, y unos meses en la Escuela Creativa de música de la calle La Palma de Madrid fueron clave para intensificar el gusanillo y animarme a una beca que daba la AIE para LIPA (la Escuela de Música de Paul Mcartney en Liverpool). Tras ser ser becado por 3 años, una vez ahí, lo veía todo muy claro. Esa experiencia fue clave en lo vital y en la búsqueda de una «voz musical» propia, pero no tanto en lo académico/teórico, que ahí en Liverpool no iba mucho de eso. 


Para ti ¿qué requisitos debe cumplir un buen cantante? 
Un cantante debe tener su propia identidad, su autenticidad. De manera sincera, que te creas lo que te está transmitiendo. Eso deja un amplio abanico de estilos, texturas, colores, y formas de hacerlo. Para gustos los colores, con tal de que lo que transmita sea auténtico. Luego a uno también le gusta que mime un poco la música, de dónde vienen las cosas, y que eso se lo transmita a generaciones venideras.  


¿Y un buen músico?
Por encima de todo que sepa escuchar. Respeto a los demás músicos y, sobre todo, a sí mismo con la música que hace, por ahí suele andar el buen gusto. 


Como cantante, ¿Qué sensaciones experimentas cuando estás cantando y qué intentas transmitir?
Tiene mucho misterio. Es algo visceral, espiritual y esa mística relación con la música te traslada a otro lugar. Procuras transmitir algo sincero, que a menudo el oyente lo recoge a su manera y lo vuelve a interpretar.  Aunque transmitas una emoción concreta, el público lo recibirá a su manera, dependiendo del día que tenga, y se genera una comunicación de muchas capas. La interacción entre cantante y público también es todo misterio, como un juego cómplice entre extraños.  

¿Qué escuchas diariamente? Últimamente, este final de año 2020 y principio de 2021, estoy con el disco «Canyons» de Young Gun Silver Fox (una muy grata recomendación que me llegó de una amiga). ¿A diario?, creo que nada de manera repetitiva. También mezclas de canciones grabadas con un nuevo proyecto que tengo entre manos llamado COMBO PARADISO junto con Julián Maeso, Alberto Anaut, y Adrián Costa. Los 4 hemos grabado 11 canciones en plena pandemia en el Náutico de San Vicente Do Mar. Algo muy especial se creó en verano, fue evolucionando a lo largo de conciertos improvisados, y finalmente en noviembre decidimos grabar canciones propias inéditas en castellano, con mucho positivismo para este 2021. ¿Estilos que quizás escucho?, recomiendo la playlist de Spotify : «soul in da city» 

¿Cómo ves el panorama actual?

Lleno de incertidumbre, inseguridad, precipicio musical. A menudo eso se presta mucho a la creatividad. Así que la inexpugnable fuerza de la música se impondrá y saldrá airosa como siempre. Pase lo que pase, pase quien pase. 

Preguntas PING PONG  (Responde con una palabra) 

Una ciudad:  Lisboa 
Una canción:  God only knows
Un disco:    The nightfly-  Donald Fagen 
Un cantant@ :    Ray Lamontagne
Un libro:       El hambre, martin caparrós
Un músico:    Julian Maeso
Una bebida:  Licor café 
Una comida:     Caldo Gallego 
Un bar/pub :     Troubadour, Londres
Un lugar:   El Náutico de San Vicente Do Mar
Un restaurante:   As cobas, Coruña
Una película:     Stand By Me 
Un coche:     Berlingo blanca 

Cuéntanos algo que te encanta: El humor inglés 
Algo que odias: La superficialidad o doble cara inglesa 

Cuéntanos qué cosas vas a hacer próximamente:

Saldrá disco nuevo con COMBO PARADISO a finales de febrero, nuevas canciones propias grabadas con mi banda, en forma de EP o quizás LP….a sacar en 2021… Mientras, seguir promocionando el último EP de 2020 que no pudo ver la luz, «CERCEDILLA SESSIONS»

PARA LA SECCIÓN DE ANÉCDOTAS
Cuéntanos algo que te haya ocurrido en algún concierto, de gira o algo relacionado con el mundo musical

En BERMEO, como parte del ciclo «Artistas en Ruta» de AIE, hubo problemas varios: poca promoción, poca tirada de entradas…. Tan solo veintitantas concretamente…… El suelo de la sala era muy amplio y se generaba una frialdad terrible mutua, tanto para el público, como para la banda… Así que, a mitad del concierto invité a los 20 del público a subirse al escenario con la banda, a gozar el bolo con ellos… Y yo les canté desde abajo, donde ellos habían estado escuchando previamente… Eso rompió el hielo enseguida ¡y lo gozamos como conciertazo!